Tras su paso por el quirófano para solucionar su lesión de escafoides, Casey Stoner ha regresado la acción en el test de MotoGP en Malasia. La jornada ha deparado buenas y malas noticias al australiano. Por un lado, ha cosechado buenos registros, hasta auparse al segundo puesto de la tabla de tiempos, a sólo 0.169s. de Loris Capirossi. Por otro, ha podido constatar que las molestias en su operada muñeca izquierda todavía no son cosa del pasado.
"Esta mañana ha resultado muy difícil, me sentía incómodo sobre la moto. “Todavía tengo bastante dolor en la muñeca y sinceramente, esperaba estar mejor después de tres meses desde la operación, aunque los tiempos han sido buenos desde el inicio. En cualquier caso, todavía me molesta, está débil y aún me duele, sobre todo en las frenadas antes de las curvas a izquierda”.
“No me permite hacer más de cuatro o cinco vueltas seguidas, y de momento no hay nada que pueda hacer, salvo esperar que la cosa mejore con el tiempo” se ha lamentado el australiano. “Además, Sepang es una pista muy dura físicamente, no es el mejor escenario para volver a pilotar tras una operación y tres meses de inactividad. He preferido no rodar excesivamente para no cansarme y espero que mañana vaya mejor”.
Comentando las novedades en su nueva montura, el australiano del equipo Ducati Marlboro ha indicado: “La GP9 va bien y he tenido las mismas sensaciones positivas que las otras dos ocasiones en las que rodé con ella, en Barcelona y Valencia”.
“El chasis es completamente diferente y tendremos que trabajar en su configuración para mejorarlo pero ya está en un buen punto pese a usar aun las referencias de la GP8. Bridgestone ha traído dos compuestos que van bien, aunque yo prefiero el más duro. Es un poco más difícil pero garantiza un rendimiento más constante”.
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